domingo, 29 de abril de 2012

Termina la semana 69, comienza la semana 70


Ahora voy a mostrar, sin lugar a duda alguna, que existen evidencias obvias de una asombrosa diferencia entre dos eventos que sucederán en los días venideros. El Rapto y la Segunda Venida.

Los muertos en Cristo

Noten en primer lugar, que el Rapto tiene que obligatoriamente tratarse de un evento diferente de la reunión que harán los ángeles en Mateo 24:31.

Cuando Jesús dijo lo que se relata en Mateo 24:31, varias cosas aún no habían sucedido.

1. Jesús no había muerto por los pecados de la humanidad.
2. Los judíos no lo habían rechazado como su Mesías (lo que hicieron cuando lo crucificaron).
3. Jesús todavía estaba en la tierra buscando a "los suyos", pero los suyos no le recibieron y conforme el mismo Señor Jesús le explicó a la señora samaritana que fue ante él a solicitar la sanidad de su hija y a la ramera samaritana del pozo, la salvación del Mesías era para los judíos, que eran los "hijos" y presumiblemente, no para los gentiles, que éramos no más que "perritos" y por lo tanto no-herederos.
4. La enseñanza que Jesús se encuentra dando en Mateo 24.31 es estrictamente para los interlocutores judíos, a quienes Él vino a salvar, no para la iglesia gentil, que no había nacido porque los judíos aún no lo habían rechazado a Él como su Mesías.


En Mateo 24:31 Jesús le dice a los Judíos (Jacob):

"Enviará sus ángeles con gran voz de trompeta y juntarán a sus escogidos de los cuatro vientos, desde un extremo del cielo hasta el otro."

Pero note que este evento de Mateo 24 tiene que ser diferente a otro que décadas más tarde, Pablo, un Judío que sí aceptó a Jesús como su Mesías y como su Salvador, pero que también se lavó las manos porque cuando intentó llevar el mensaje de Jesús al pueblo judío, fue rechazado, dijo... A LA IGLESIA GENTIL!:

1 Tesal. 4:13-18

"Tampoco queremos, hermanos (gentiles), que ignoréis acerca de los que duermen, para que no os entristezcáis como los otros que no tienen esperanza. Si creemos que Jesús murió y resucitó (Los judíos ni creían ni creen ninguna de las dos cosas), así también traerá Dios con Jesús a los que durmieron en él. Por lo cual os decimos esto en palabra del Señor: que nosotros que vivimos, que habremos quedado hasta la venida del Señor, no precederemos a los que durmieron. El Señor mismo, con voz de mando, con voz de arcángel y con trompeta de Dios, descenderá del cielo. Entonces, los muertos en Cristo resucitarán primero. Luego nosotros, los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor. Por tanto, alentaos los unos a los otros con estas palabras." 1 Tesalonicenses 4:13-18
A buen entendedor, pocas palabras bastan!

Aquí Jesús no necesita enviar a ángeles para que recojan a sus electos (que serán los judíos que durante la Gran Tribulación lo aceptarán como Mesías). No. Por el contrario, como si para recompensar a aquellos a quienes no vino, pero que de todas formas le recibieron, ÉL MISMO VENDRÁ, "con voz de mando, con voz de arcángel y con trompeta de Dios, descenderá (Jesús mismo) del cielo.... y seremos arrebatados... en las nubes para recibir al Señor en el aire".

El que no ve que estos dos eventos son diferentes, es un ciego espiritual y tiene poca autoridad para estar debatiendo estos asuntos escatológicos.

Otra diferencia importante: La voz de mando

Las tres veces que el Nuevo Testamento registra a Jesús gritando o levantando la voz en el Nuevo Testamento, noten lo que sucede:

1. En Juan 11:43, un hombre llamado Lázaro es resucitado.
2. En Mateo 27:46, 52, Cristo entrega su espíritu y muchas de las tumbas de santos muertos son resucitados
3. Y en 1 Tesalonicenses 4:16, millones son resucitados. ¡Aleluya! ¡Me gusta cuando Jesús levanta su voz!

Y aún les proporciono una diferencia adicional:



La voz de un arcángel:

En Daniel 10:21, en Daniel 12:1, en Judas 1:9, y en Apocalipsis 12:7 la Palabra de Dios nos menciona a un arcángel poderoso llamado Miguel. Y asombrosa como es la Biblia, para que no existan confusiones, en Daniel 12:1, a Daniel se le dice ...

El tiempo del fin

»En aquel tiempo se levantará Miguel, el gran príncipe que está de parte de los hijos de tu pueblo (Judíos) (La Iglesia gentil aún no existiría por siglos).

»Será tiempo de angustia,
cual nunca fue desde que hubo gente hasta entonces;
pero en aquel tiempo será libertado tu pueblo (Judío),
todos los que se hallen inscritos en el libro.
2 Muchos de los que duermen en el polvo de la tierra
serán despertados: unos para vida eterna,
otros para vergüenza y confusión perpetua.
3 Los entendidos resplandecerán
como el resplandor del firmamento;
y los que enseñan la justicia a la multitud,
como las estrellas, a perpetua eternidad.

Note que Daniel aquí, siglos antes de que viniera el Mesías, intenta entender qué sucedería con su pueblo, EL PUEBLO JUDÍO, en los tiempos del fin. A estas alturas del relato, al mismo Daniel ya se le había dado la profecía de las 70 semanas, en la que se dividiría la historia humana restante en 70 semanas, cada semana representando una semana de años (una semana = 7 días de años), y en la que específicamente se le explicaba a Daniel que durante esas 70 semanas, Dios trataría con SU PUEBLO JUDÍO, pero que entre la semana 69 y la 70, Él, Dios, soberano como es, abriría un paréntesis para que la promesa hecha a Abraham, de que en el Mesías habría salvación para todas las familias de la tierra, no solamente para los judíos, Dios abriría un paréntesis y hoy, amados hermanos gentiles de Perú, Venezuela, España y El Salvador, estamos viviendo dentro de ese paréntesis... justo entre la semana 69 y la 70, que fueron decretadas por Dios para tratar con Jacob (Israel), pero una vez Dios cierre ese paréntesis, que en Romanos 11, Pablo llama "la plenitud de los gentiles", el reloj profético se resetea y justo donde concluyó la semana 69 comienza la semana 70... ¡QUE ES LA SEMANA DE 7 DÍAS O AÑOS DE LA GRAN TRIBULACIÓN!... ¿Para quién? Para los judíos... porque los gentiles habremos sido cosechados ya por el mismo Señor. ¡¡¡¡Aleluyazaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!!!!!!


Amados hermanos y hermanas de ADF, cuando suene la "trompeta de Dios", será el momento para nosotros marcharnos y volver a casa. Ese también será el momento en que las cosas irán de mal en peor para los moradores de la tierra que permanezcan. También irán las cosas muy mal para "los suyos", pero de "los suyos" se encargará "el que no duerme... el que no tambalea, el que lo puede todo... El que guarda a Israel"

Lic. Dawlin Ureña
(El Lic. Ureña es Pastor, y miembro de la Asociación Científica
CRS - Creation Research Society)

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